sábado, 7 de diciembre de 2013

LA DIABETES Y LA DEMENCIA

Hasta el momento creíamos conocer todos los riesgos que supone para nuestro organismo el hecho de padecer diabetes, pero al parecer no estábamos en lo cierto.

Según un estudio realizado en la universidad de Kyushu en Fukuoka, Japón, y publicado en la revista Neurology se cree que la diabetes debe ser considerada un factor de riesgo para la demencia, y por tanto es muy importante controlarla.

En el estudio participaron 1017 personas mayores de 60 años, las cuales fueron seguidas durante 11 años comprobando su tolerancia a la glucosa para determinar los casos de diabetes y siguiendo las apariciones de demencia. Al final del estudio se concluyó que las personas diabéticas son dos veces más propensas a desarrollar Alzheimer o demencia vascular entre otros. Esta última consiste en la existencia de daños en los vasos sanguíneos que privan de oxígeno al cerebro.

Este riesgo era significativamente mayor también en personas no diabéticas con intolerancia a la glucosa y en aquellos individuos que poseen altos niveles de glucosa dos horas después de las comidas. 

Podemos pensar que esto es tan solo un estudio, y que en cualquier momento se puede llevar a cabo otro que eche por tierra todo lo demostrado, pero debemos tener en cuenta la gran probabilidad de que sea cierto y controlar muy bien nuestro estado, no solo con la intención de evitar un nuevo factor de riesgo para la demencia, sino también para conservar nuestra salud de la mejor forma posible.

Fuente: MuyInteresante

PREVENCIÓN DE LA MENINGITIS

MEDIDAS BÁSICAS PARA LA PREVENCIÓN DE LA ENFERMEDAD

La meningitis es una enfermedad con carácter estacional por lo que es evidente que con el cambio de estación la incidencia de la patología aumentará considerablemente.
La vacunación es el método más eficaz para combatir la enfermedad pero existen otro tipo de medidas que se pueden llevar a cabo y que poseen una transcendencia similar.

  • Proporcionar a los lactantes leche materna que los proveerá de anticuerpos para combatir la enfermedad .Este punto es de gran interés porque es importantísimo reforzar el sistema inmunológico
             
          
  • Medidas básicas de higiene personal y del hogar.Lavarse las manos antes de consumir alimentos y después de ir al baño.Limpieza en los hogares haciendo hincapié en los aseos y baños.
          
               
  • Evitar ambientes cerrados.No permanecer en ambientes poco ventilados donde podamos encontrar gérmenes o carga de humo de tabaco que puedan irritar las vías respiratorias .En el caso de que estemos ante el caso de niños debemos evitar que compartan utensilios de aseo personal o vasos...
             
  • Vacunación: como dijimos anteriormente es el pilar más importante a la hora de prevenir.Para ello todos los niños deben tener la vacuna contra meninngococo,contra el neumococo (pcv13),antineumocócica polisaccárica hemophilius influenza tipo b

Fuente :geosaludoms


Drogas Narcóticas

El campo de los narcóticos se puede dividir, actualmente en varios campos. Estos campos se conforman por drogas con composiciones y orígenes distintos, pero que tienen en común el efecto que provocan sobre el organismo, aunque este pueda manifestarse de distinta manera y en grados diferentes. Son los siguientes:

  • Neurolépticos o tranquilizantes mayores. Son sustancias utilizadas para tratar la depresión, psicosis y manias. Algunos de ellos pueden venderse sin prescripción médica. Son sumamente tóxicos produciendo efectos adversos como la enfermedad de Parkinson, destrucción de las células de la sangre, arritmia cardiaca anemia y un largo etcétera. En última estancia podrían incluso causar la muerte.
  • Ansiolíticos o tranquilizantes. Habitualmente son usados para tratar la neurosis. Pueden causar letargia, estupor y coma con frecuencia. En el caso de adicción pueden causar alteraciones hemáticas. Al abandonar su consumo aparecen episodios depresivos, desasosiego o insomnio que suelen ser muy duraderos. 
  • Somníferos o barbitúricos. Su uso puede provocar daño en los riñones y en el hígado, producir erupciones cutáneas, dolores articulares, hipotensión, estreñimiento y tendencia al colapso circulatorio. La intoxicación aguda puede llevar a la muerte provocada por la falta de oxígeno en el organismo.
  • Grandes narcóticos. En  dosis leves provocan una primera fase de excitación cordial, como el alcohol. Luego provocan sedación y sopor. 
Los narcóticos actúan al fijarse a los receptores del dolor en el cerebro. 
Los receptores del dolor reciben señales químicas enviadas al cerebro, las cuales causan la sensación de dolor. Así, los narcóticos se fijan a estos receptores y pueden evitar esta sensación. Aún con esto, los narcóticos solo reducen el dolor de forma temporal y no actúan sobre la fuente de él.



Asma: mitos y realidads

MITO: Solo se tiene asma cuando tiene dificultad para respirar.
REALIDAD: Puede no tener síntomas, pero tener las vías respiratorias inflamadas. La inflamación puede no desaparecer al hacerlo los síntomas.

MITO: Todo el mundo tiene los mismos síntomas.
REALIDAD: A cada persona afecta de manera distinto. Alguien puede tener solo tos, y otros sibilancias.

MITO: El asma no es "real", está en su cabeza.
REALIDAD: El asma ocurre en los pulmones y en las vías respiratorias, pero hay factores, como el estrés, que pueden desencadenar algún brote.

MITO: Los esteroides utilizados como medicación para el asma, son peligrosos.
REALIDAD: Si se utilizan en las dosis adecuadas, y recomendadas por el médico, los beneficios superan a los riesgos. Además, no son los mismos esteroides anabólicos que se utilizan para aumentar la masa muscular de algunos atletas.

MITO: Los esteroides atrofian el crecimiento
REALIDAD: En algunos casos puede retrasar el crecimiento en las primeras etapas de éste, pero alcanzan la estatura normal adulta. Además, hay que tener en cuenta que un niño que sufre siempre síntomas no crecerá de la misma manera que un niño sano.

MITO: Los niños superan el asma con la edad.
REALIDAD: El asma no tiene cura, aunque pasado el tiempo puede parecer que haya desaparecido o parecer una enfermedad menos grave. Al crecer, las vías respiratorias de los niños se expanden y provoca una disminución de los síntomas que, sin embargo, pueden reaparecer en cualquier momento.

MITO: Un niño con asma debe evitar el ejercicio físico y no ser activo.
REALIDAD: Debe hacer el mismo ejercicio que un niño sin asma, pero controlando el asma y siguiendo las recomendaciones del médico, para prevenir posibles ataques.